viernes, 12 de agosto de 2011

INDIA DEL SUR. 10- KERALA. El estado de la hoz y el martillo.

A medida que nos adentramos en Kerala se van haciendo manifiestas las diferencias con Tamil Nadu. Y no sólo porque el color de sus tuc-tuc pase de ser amarillo a amarillo-negro...

El paisaje se vuelve más selvático, con una vegetación más exuberante en la que las palmeras, introducidas desde Ceilán, adquieren protagonismo absoluto. De ahí su nombre: Kera alam, el lugar de los cocos...

Otros detalles van mostrándose sutilmente:

La piel de sus habitantes es algo más clara, sus ciudades algo más limpias y menos caóticas (o será que ya nos vamos acostumbrando?), el idioma, el malayalam, más suave y musical... y la comida, en la que el coco también es protagonista, aunque especiada, menos picante.

Los templos hinduístas, la religión predominante en Tamil Nadu, van cediendo el protagonismo a iglesias y mezquitas, coexistiendo todas en armonía. Los católicos (incluyo también protestantes y cristianos ortodoxos) son especialmente devotos en el centro del estado y muestran gran veneración por la imagen del corazón de Jesús. Resulta muy curioso observar alguna de esas fervientes ceremonias y escuchar los cantos de las mujeres.

Pero, con todo, lo que más llama la atención en cuanto se entra en Kerala es la presencia del símbolo de la hoz y el martillo. Es algo omnipresente en carteles, pintadas, monumentos en las esquinas de las calles... asociado a sus líderes políticos y a imágenes icónicas como la del Che Guevara.
Resulta sorprendente, y emocionante, cuando en el resto del mundo, hasta en los países que enarbolaron esa bandera, es una imagen y una ideología denostada y en desuso.

Y es que, este estado de treinta millones de habitantes y una superficie similar a la de Bélgica, fue el primero del mundo en tener, allá por 1957, un gobierno comunista electo!

La combinación de ideas socialistas y democráticas ha hecho que Kerala sea el estado socialmente más avanzado de India, el de mayor índice de alfabetización (cercano al 95%), con el mejor reparto de la riqueza (“solo” un 17% viven bajo el umbral de la pobreza, frente al 37% del resto del país) y el mejor sistema sanitario, lo que hace que la esperanza de vida, 73 años, sea diez años superior al resto del país. La mujer también goza de mayor consideración (Entre otras cosas el aborto selectivo, practicado para evitar el problema de endeudamiento que supone la dote de las hijas, está muy perseguido)... Pero, sobre todo, es algo que ha calado en la mentalidad de sus habitantes más allá de los gobernantes electos de turno. 

En fin, no sigo porque me entusiasmo...




1 comentario:

juan dijo...

Hola Marisa.
Dice un viejo y sentido bolero... querer a quien no te quiere, eso se llama querer. Por que querer a quien te quiere eso, eso solo es corresponder.
Correspondo pues, a tu dedicación, a tu cariño y a tu seguimiento. Estoy de nuevo en Madrid. Lugar donde se cruzan todos los caminos....
Me encantan tus crónicas. Estoy aprendiendo mucho. Y a partir de hoy, ya tendrás cumplida respuesta.
Un beso y disfruta
J